Diagnóstico del exceso de nitrógeno en maíz

Expo_SIN_2013_Wed_by LA (20)En el estado de Oregón (EUA) se han evaluado dos métodos para realizar pruebas de nitrógeno (N) poscosecha en maíz dulce — la prueba de N-nitrato en el tallo y la prueba de N-nitrato en el suelo.

Ambas pruebas fueron diseñadas para evaluar si es excesivo el aporte de N disponible para el cultivo, considerando todas las fuentes (insumos orgánicos, fertilizante, agua de riego y N mineralizado proveniente de materia orgánica del suelo). En este artículo hablaremos sobre la prueba poscosecha de nitrato en el suelo, ya que de las dos pruebas que se realizan al final del ciclo de producción, ésta es la más útil y la más confiable.

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Las pruebas poscosecha no indicarán si el aporte de N fue deficiente o suficiente. Al establecer un programa de monitoreo de nitrógeno, deben iniciar con la prueba de nitrato antes de aplicar el abono al suelo (PSNT). En la región occidental de Oregón se utiliza la prueba PSNT cuando el maíz dulce tiene cinco o seis hojas, ya que es un indicador excelente para saber cuándo se requiere N adicional.

Las pruebas poscosecha son más valiosas cuando el N proviene de insumos orgánicos, porque con estos materiales es difícil calcular con exactitud la cantidad de N que tendrá a su disposición el cultivo y el tiempo que estará disponible.

Cómo determinar el exceso de nitrógeno

La prueba de N-nitrato poscosecha se usa para diagnosticar la acumulación de N en exceso al final del ciclo. El N se acumula en exceso cuando el N disponible para el cultivo, proveniente de todas las fuentes, excede la capacidad de absorción de N que tiene el cultivo.
Empiecen por recolectar suelo (0- a 30 cm de profundidad) inmediatamente después de la siguiente cosecha.

Cuando llueva después de la cosecha y se inicie la descomposición de los residuos, el N soluble pasará de las hojas en descomposición al suelo. Este N soluble puede añadir N-nitrato que no estaba presente durante la cosecha, creando confusión en la interpretación de la prueba.

Se ha medido en varias pruebas de campo realizadas en granjas y en estaciones experimentales el efecto que tiene la dosis de aplicación de fertilizantes nitrogenados sobre la cantidad de N-nitrato post-cosecha. Cuando la prueba de NO3-N (N-nitrato) realizada en la capa superior de suelo (30 cm) da como resultado cerca de 60 kg/ha, con toda probabilidad el aporte de N suministrado por todas las fuentes fue más de lo que se requería para obtener el máximo rendimiento de mazorcas.

En cuanto a la relación entre la dosis de fertilizante N y la absorción de N por parte del maíz y el nitrato que queda en el suelo después de la cosecha, en estas pruebas se alcanzó el rendimiento máximo de mazorcas con 100 a 200 kilos de N por hectárea. Con dosis de fertilizante N de 0 a 150 kilos por hectárea, el maíz dulce mostró una tasa de absorción de N eficiente y el N-nitrato poscosecha fue menos de 50 kilos de N por hectárea.

Con la dosis más alta de fertilizante N (200 kilos por hectárea), el N-nitrato poscosecha promedió 80 kilos por hectárea y tuvo mayor variabilidad (fluctuando entre 45 y 125 kilos por hectárea). Aun cuando se ha demostrado que existe una relación entre la dosis de fertilizante N (o aporte de N) y el NO3-N del suelo después de la cosecha, es importante recordar que NO3-N del suelo depende de las prácticas de riego. Los valores bajos de NO3-N en la cosecha pueden ser resultado de riego excesivo.

Artículo extraído de la guía para el manejo de nutrientes en maíz dulce “The Sweet Corn Nutrient Management Guide” de la Universidad Estatal de Oregón (Estados Unidos).