En la primera parte de este artículo explicábamos la importancia del mantenimiento de un cultivo de tomate equilibrado para obtener mayor producción de frutos de calidad. Observación, fases de desarrollo y potencia del cultivo fueron examinadas en dicha entrega. A continuación desarrollamos otros conceptos igualmente relevantes en el cultivo de tomate bajo condiciones protegidas.
Calefacción
Deshoje
2) Se elimina algún exceso de energía en el cultivo y la relación hojas/raíces/frutos se equilibra mejor. Pero lo más importante es que se mantiene una longitud de hoja estable.
Manejo del agua
Distribución de asimilados
La investigación ha demostrado que ante la presencia de uno a tres frutos en el racimo, del 20 al 50% de los asimilados van al fruto. Si se dejan seis o siete frutos en el racimo, del 60 al 70% de los asimilados van al fruto. En consecuencia, la carga de frutos influencia la distribución de asimilados — cuantos más frutos, mayor será la atracción de asimilados.
Cuando la carga de frutos es baja, tal como ocurre en los comienzos del cultivo, los asimilados se dirigen hacia otros órganos, tales como hojas y raíces. Como resultado, las hojas se vuelven gruesas, largas y curvadas (especialmente si se han introducido altos niveles de CO2).
Desarrollo de las raíces
El número de frutos por metro cuadrado o por racimo determina qué volumen de producción de asimilados en las hojas va al fruto y a otros órganos (hojas, tallos, raíces).
Sumario
El autor es experto en tecnología de invernadero y actualmente labora como consultor privado para productores de hortalizas y otros cultivos. Parte de este artículo fue publicado en el boletín eHortalizas del 23 de octubre 2008 como respuesta a la pregunta de varios lectores. Para más información escriba a pdh.edit@meistermedia.com