Cuando uno piensa en invernaderos de alta tecnología normalmente se asocian con el alto costo de los equipos y sobre todo con la dificultad de poder usarlos de manera adecuada. Hace unos días estaba en una reunión con un grupo de productores entre los cuales había algunos con ciertos años de experiencia. Antes de hablar de las tecnologías, tocamos el tema de los requisitos básicos para la instalación de un invernadero de 3 ha, que se encuentran en boga por los apoyos del gobierno a la agricultura intensiva.
Al avanzar, la plática se enfocó rápidamente en el consumo de agua, para lo cual se considera que el invernadero podría ayudarles a tener un ahorro sustancial de este recurso. Lo anterior es cierto, pero ¡para ahorrar agua, primero se necesita tenerla! Así que se sorprendieron cuando hablamos de las necesidades del cultivo de invernadero — ya que para obtener un elevado rendimiento se requiere un promedio de 20,000 m3 de agua por ha — así que para un proyecto de 3 ha se requiere de una capacidad de almacenamiento de 60,000 m3 de agua de buena calidad. Es decir, que en promedio van a utilizar entre 180 y 200 m3 por día, para regar las 60,000 plantas que se tendrían en 3 ha.
Relación agua y producción de tomate
| Invernadero de alta tecnología | Aproximadamente de 50 L de agua por kg de tomate producido |
| Baja tecnología | 80 L x kg de tomate producido |
| Campo abierto | Hasta de 170 L por kg de tomate producido |
Les expliqué que la idea del invernadero es aprovechar la energía solar para transformarla en materia seca al interior de los frutos. El secreto de la tecnología no es que ésta sea la más avanzada, sino que el productor sepa cómo utilizarla. De esta manera, ya se están aprendiendo los trucos para aumentar el rendimiento de las plantas, sin tenerlas en el mejor ambiente posible sino, con un margen de estrés hídrico para estimular el funcionamiento productivo de la planta.
Utilización adecuada del sustrato
Cuando hicimos un corte lateral de una de las bolsas del sustrato, observamos que la raíz tenía una formación inusual con ramificaciones abundantes en la parte inferior del sustrato y muy pocas raíces en la parte superior.
Cuestión de enfoque
Posteriormente, cuando hicimos una evaluación de los riegos, determinamos que con solo variar el volumen y la frecuencia de los riegos, se podría reducir la incidencia de Botrytis que para el mes de febrero era un problema mayor. La lección de riego concluyó con la variación del tiempo de riego inicial, y el aplicar mayor volumen con más espaciamiento, a fin de permitir el lavado adecuado de las sales, evitando su nociva acumulación en el contenedor del sustrato.