Factores que influyen en el crecimiento del mercado de insumos de control biológico

Foto cortesía de iStockphoto.

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Sin importar el término que prefiera utilizar: medios de biocontrol, bioplaguicidas o productos biorracionales, nadie debate el hecho de que el sector de control biológico está experimentando gran crecimiento y continúa atrayendo el interés de los sectores dedicados a producción y protección de cultivos.

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Diferentes características de control
Para aclarar la terminología, biocontrol” se utiliza con frecuencia para referirse a los macroorganismos (parásitos y depredadores) utilizados en las aplicaciones para protección de cultivos; aun cuando algunas personas utilizan el término para definir una clase totalmente incluyente de productos que contienen microorganismos (bacterias, hongos, protozoarios, virus y levadura); así como productos bioquímicos (reguladores de fitocrecimiento, reguladores de crecimiento de insectos, extractos vegetales, semioquímicos, ácidos orgánicos y minerales.

En contraste, el término “bioplaguicida” incluye microorganismos y productos bioquímicos, sin embargo no incluye macroorganismos.

“Biorracional” es un término mucho más descriptivo para este mismo grupo de productos, mediante el que se reconoce la naturaleza no plaguicida de muchos ingredientes activos erróneamente regulados como bioplaguicidas.

Los reguladores de crecimiento vegetal son el ejemplo perfecto, ya que promueven, inhiben o modifican las características fisiológicas de los cultivos para mejorar su productividad; sin los efectos plaguicidas.

Beneficios de los bioplaguicidas
Los bioplaguicidas proporcionan grandes beneficios al sector de protección/producción de cultivos; ocasionalmente en forma de productos individuales, pero con más frecuencia en forma de productos complementarios utilizados en programas integrados con productos químicos convencionales.

Los beneficios de los bioplaguicidas han sido reconocidos desde hace mucho tiempo; sin embargo su adopción se ha limitado debido al espectro estrecho de la mayoría de los productos biológicos o a la percepción negativa de algunos consumidores, provocada por experiencias pasadas o por los beneficios exagerados declarados por los fabricantes.

Con el tiempo, sin embargo, la concientización y la comprensión del papel de los bioplaguicidas, así como el conocimiento de la mejor forma de utilizarlos se han ido incrementando de manera positiva.

UntitledLa presión normativa crea oportunidades
La presión normativa sobre los plaguicidas convencionales en los principales mercados alrededor del mundo, ha generado gran interés en la búsqueda de alternativas.

Muchos productos químicos convencionales han salido del mercado cuando la presión normativa impide su uso; creando espacios y oportunidades para la entrada de nuevos productos.

El Decreto para la Protección de la Calidad de los Alimentos, “Food Quality Protection Act” de 1996 dio como resultado la salida del mercado en distintas fases de los productos organofosfatados y carbamatos que habían sido ampliamente utilizados en el mercado estadounidense.

El proceso de registro Europeo ha tenido un impacto similar, ya que más de 280 productos comercialmente importantes han sido eliminados del mercado europeo desde que el Registro empezó a operar en el 2008.

Este espacio vacío en el mercado no sólo genera oportunidades para los fabricantes de bioplaguicidas, sino que el costo de introducir un nuevo producto biorracional al mercado es una pequeña fracción del costo requerido para introducir un producto convencional. Esto hace que los bioplaguicidas sean un blanco aún más atractivo para los desarrolladores de productos y otros emprendedores.

Se exigen productos de bajo potencial de residuo
En virtud del clima normativo cada vez más exigente, la demanda de productos alimentarios con bajo poder residual ha aumentado entre los procesadores de alimentos, los mayoristas y los distribuidores.

El proceso normativo ha sido diseñado para proporcionar a los consumidores la seguridad de que los productos pueden ser utilizados de manera inocua, protegiendo tanto a los seres humanos como al medio ambiente circundante.

En este sentido, la normatividad para los bioplaguicidas no es diferente de la normatividad aplicada a los productos químicos convencionales; no obstante, muchos bioplaguicidas tienen atributos toxicológicos que de manera inherente los colocan en una categoría de riesgo reducido y por lo tanto están exentos de los límites de tolerancia de residuos.

Como mencionamos anteriormente, por lo general los bioplaguicidas se caracterizan por tener un espectro de actividad estrecho.

Aun cuando esta característica fue considerada como un factor limitante, en realidad este mismo espectro de actividad hace que los bioplaguicidas sean productos de menor impacto para seres humanos, medio ambiente y aplicaciones fuera de la plaga objetivo.

Por tal motivo, los bioplaguicidas tienen valor inherente para los productores de alimentos que buscan satisfacer la demanda de compradores que desean productos sin residuos o con bajo potencial residual.

Portafolio más completo para las empresas fabricantes
Cada vez hay un mayor número de fabricantes que aprecian el valor de los medios de biocontrol.

La agencia de investigación de mercado DunhamTrimmer valuó el mercado global de los medios de biocontrol en $2.0 mil millones USD (a nivel de productores) y en $1.4 mil millones a nivel de fabricantes, con una tasa de crecimiento anual que excede el 15%.

Una muestra de ese crecimiento fue el número de adquisiciones estratégicas que marcaron un periodo de consolidación entre las compañías de productos biorracionales.

Encabezando la lista se encuentran las adquisiciones de AgraQuest por BayerCropSciences ($425 millones, julio 2012), Becker Underwood por BASF ($1,020 millones, septiembre 2012), PasteuriaBioSciences por Syngenta ($86 millones, septiembre 2012), Pace International por ValentBioSciences ($65 millones, diciembre 2012), y Prophyta por Bayer CropSciences (enero 2013, no se revelaron los términos).

Además de las dinámicas del mercado ya mencionadas, los precios a la alza de los cultivos han sido uno de los factores que más han contribuido a generar interés en los bioplaguicidas.

Los valores más altos de cultivos tienen un efecto inherentemente positivo en el potencial de las operaciones agrícolas y hacen énfasis en los insumos que ofrecen mejores rendimientos de la inversión y permiten a los productores aumentar al máximo sus retornos en las parcelas de terreno limitadas.

Estos factores determinantes para el suministro representan una gran oportunidad para los proveedores de insumos que promueven las ofertas basadas en valor, lo cual es bastante positivo para las compañías que participan en el mercado de los métodos biorracionales.

El creciente interés en los bioplaguicidas entre compañías como Sumitomo Chemical Company, Bayer CropSciences, BASF, y Syngenta también ha dado como resultado un aumento en la promoción de la categoría de los plaguicidas por parte de compañías con credibilidad y excelente acceso al mercado.

Su participación en la categoría también demuestra que se está proyectando un mensaje con buena información sobre los bioplaguicidas al mercado. Este mensaje es realista y basado en hechos que pueden ser verificados.

Los bioplaguicidas no sólo están llenando los espacios vacíos en las carteras de productos de estas compañías, después de que otros productos perdieron su registro; sino que están siendo integrados de manera estratégica para ofrecer soluciones de la siembra a la cosecha, de una manera simplificada, mientras promueven el mensaje de “compra todo lo que requieres en una sola parada” entre los productores y los distribuidores. Mirando hacia el futuro, lo más probable es que esta tendencia prevalezca.

Mientras las compañías de productos químicos tradicionales continúan desarrollando e introduciendo productos químicos sintéticos de menor riesgo; con toda certeza, la adopción de los bioplaguicidas seguirá creciendo.

Estas avanzadas tecnologías no sólo validan y dan credibilidad a muchos de los atributos asociados con los bioplaguicidas, sino que las grandes inversiones que se requieren para llevar esos productos al mercado generan nuevas oportunidades de manejo de resistencia para los fabricantes de productos biorracionales.