15 Soluciones biorracionales que presentan resultados prometedores

Abamectina: Provoca parálisis en ácaros e insectos, pero no sirve para aplicaciones al suelo debido a su rápida degradación. Su deterioración es tal vez su desventaja más destacada, ya que se deterioran con rapidez con el calor y la radiación solar.

Bacillus thuringiensis (Bt): Varias cepas de Bt controlan insectos del orden Díptera. Esta bacteria, una de las soluciones biorracionales más utilizadas, produce una toxina que penetra en las paredes del estómago de los insectos, ocasionando que los insectos dejen
de comer.

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Beauveria bassiana: Un hongo del suelo capaz de infectar y finalmente matar a mosca blanca y áfidos. Al asperjar las esporas de este hongo, crean un tubo germinativo que se pega a la superficie de los insectos y penetra en el cuerpo de los mismos.

Nemátodos entomopatógenos: Estos gusanos microscópicos habitantes del suelo representan una buena herramienta en el control de patógenos del suelo siempre y cuando haya cierto nivel de humedad dentro del suelo, de manera que esta solución biorracional no sirve tanto durante sequía o condiciones secas.

PGPR: Estos promotores de crecimiento de rizobacteria se encuentran entre el sinnúmero de microorganismos benéficos de los cuales se están conociendo más y más de sus propiedades ventajosas. Los PGPR facilitan el desarrollo vegetativo de las plantas debido a varios mecanismos entre los cuales está la fijación biológica de nitrógeno. Asimismo, se observan mejoramientos en la emergencia, vigor, biomasa, y desarrollo de sistemas radiculares hasta 30% más en los cultivos comerciales.

Spinosad: Es ingrediente activo en más de 80 productos insecticidas registrados; se considera un producto natural y es de baja toxicidad. Este producto de tremenda versatilidad se encuentra entre los productos permitidos para los productores orgánicos.

Es un tratamiento recomendado para el control de minadores de la hoja, ácaros, mosquitos, hormigas, moscas de la fruta y trips, entre otros. La reacción del insecto al estar expuesto a este compuesto es la parálisis, ocasionando su muerte en un par de días.

Hyposoter exiguae: Esta familia de avispitas parasitarias ovopositan en los gusanos. Luego de que desarrollen su larva, el gusano hospedero se empequeñece y endurece, lo cual finalmente causa una ruptura en la piel del gusano que normalmente ocurre dentro de un mes.

Chelonus insularis: Este endoparasitoide utilizado como solución de bicontrol para el gusano cogollero, se utiliza con frecuencia, ya que esta plaga ha desarrollado resistencia a muchos insecticidas.

Trichogramma: Es tal vez el género de insectos mas empleado y extendido como un agente de control biológico.

Las avispitas que componen la familia Trichogramma son parasitarias y de gran utilidad. Las hembras son capaces de parasitar entre uno y diez hospederos a diario. La comunidad científica le ha llamado a estas avispitas “la drosófila del mundo parasitoide,” debido a que se han usado en forma de liberación masiva en el control de los lepidópteros.

Tamarixia radiata: Esta avispita es sujeto de una investigación a gran escala y con potencial incalculable para proteger a la industria de los cítricos frente a los riesgos devastadores que conlleva la dispersión del psílido vector de la enfermedad HLB.

Resultados preliminares indican que donde el psílido ya se ha establecido, el control biológico a través de Tamarixia minimiza las posibilidades de que expandan las zonas de infestación. Se han construido unas instalaciones en California para la crianza masiva de esta especie de avispita, y se anticipa una liberación de dos millones de individuos al año en el sur de dicho estado.

Jabones: Como una de las múltiples técnicas antiguas y todavía de gran utilidad, los jabones tienen la ventaja de no dejar ningún residuo cuando se asperja. Soluciones con jabón son más eficaces con los insectos de cuerpo blando como trips y la mosca blanca porque penetran su cuerpo y los deshidratan.

Diglyphus spp.: Dado a la gran cantidad de parásitos que atacan al minador de la hoja, esta plaga no suele provocar daños muy graves, de manera que se puede controlar con los insectos benéficos.

Solentous intermedius: Otro insecto parasitario del minador de la hoja.

Amblyseius swirskii: es una especie cuya población, ante la presencia de alimento, incrementa rápidamente y coloniza hojas y flores cubriendo toda la planta. Con ello, se evita que los trips se establezcan y dañen al cultivo.

Azadiractina: Producto del árbol de neem, es un terpenoide que sirve como inhibidor de crecimiento en las plagas, reduce la fecundidad y la ovoposición debido a su capacidad de interferir en los procesos de metamorfosis y la eventual muerte de la plaga afectada.


Fuente: “Insecticidas biorracionales” por Dr. H. O’Farrill-Nieves, Univ. de Puerto Rico-Mayaguez