Conexión entre nutrientes en los agroalimentos y el suelo

Suelo: Organismo de vida

¿Alguna vez ha considerado la relación entre la nutrición humana y la fertilidad del suelo? Mientras la mayoría de las personas están al tanto de la necesidad de conservar los recursos del suelo, también está aumentando el interés en la función que desempeña la fertilidad del suelo en la calidad nutritiva en frutas y hortalizas frescas para consumo humano.

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Algunos productores han optado por implementar métodos de producción orgánica, una práctica que elimina la utilización de ciertos insumos externos, en particular fertilizantes, plaguicidas y otros agroquímicos. Ciertos cultivos de legumbres, tales como alfalfa, soya y tréboles pueden captar su propias necesidades de nitrógeno del aire; sin embargo, las reservas de fósforo y potasio disponibles en el suelo para las plantas son finitas y la utilizacion anual agota el suministro en el suelo en ausencia de alguna forma de aditivo externo.

Organismos del suelo
Los organismos del suelo son esenciales para la producción de cualquier cultivo. En adición a la función que desempeñan en los procesos de formación del suelo, también son importantes recicladores de nutrientes del mismo. La presencia de organismos más desarrollados, tales como las lombrices de tierra, es generalmente indicativa de una alta calidad de suelo con buena estructura y bajo contenido de sal.

Las lombrices de tierra también son excelentes recicladores de nutrientes. Desafortunadamente, otros organismos desarrollados tales como nemátodos e insectos tienen un efecto perjudicial sobre el desarrollo del cultivo, aun cuando sean importantes en el reciclaje de nutrientes.

Dado que la mayoría de estos organismos son relevantes para el desarrollo del cultivo, es importante preguntarnos — ¿cómo impacta la utilización de nutrientes fertilizantes de fuentes orgánicas y no orgánicas en estos organismos y en la propia calidad del suelo?

Investigaciones han demostrado que el uso indiscriminado de ambos fertilizantes minerales y estiércol animal resultan en la disminución del número de organismos benéficos en el suelo. Sin embargo, cuando se aplican apropiadamente, el balance neto del impacto suele ser positivo.

Conexión entre nutrientes en los agroalimentos y el suelo

Fertilizantes para el suelo
Históricamente, el motivo principal para justificar la aplicación de fertilizantes al suelo es el de incrementar el rendimiento y mejorar la calidad del fruto. Con el desarrollo de innovación genética, maquinaria, fertilizantes y otros químicos agrícolas, los productores han podido incrementar su rendimiento por hectárea. Irónicamente, los suelos que están produciendo un superávit de alimentos, también están sufriendo escrutinio por parte del público, debido  a su presunta calidad cuestionable.

Estudios en Estados Unidos y en Reino Unido han tratado de demostrar cómo el contenido mineral y de vitaminas en los alimentos está disminuyendo, debido al deterioro en la calidad del suelo, la cual no cuenta con los nutrientes que una vez contenía. El estudio titulado “Nutrición bajo cerco” examinó datos publicados por el Departamento de Agricultura de EUA (USDA), concluyendo que en una comparación de éstos se demostró un “declive en contenido de minerales, vitaminas y otros nutrientes en muchos alimentos desde su último examen más de veinte años atrás,” la cual puede ser atribuida al “deterioro del suelo, del aire y de la calidad del agua.”

El USDA examinó diez frutas y hortalizas frescas comunes, analizando su contenido de calcio, magnesio y potasio. Aunque a primera vista los resultados sugieren que sí existe una reducción en contenido mineral, cuando la relación entre la carga de cationes del calcio, magnesio y potasio son examinadas de cerca, no existen diferencias de balance mineral entre datos antiguos y nuevos.

La relaciones relativamente estables entre los cationes de estos tres macronutrientes argumenta que o los tres están siendo empobrecidos proporcionadamente de los suelos, o alternativamente, ninguno está siendo empobrecido, mostrando la necesidad de trabajos investigativos que ofrezcan explicaciones alternativas y más concluyentes.