Políticas proteccionistas frenan la exportación del limón argentino a EUA

La apertura del mercado estadounidense al limón argentino hubiera sido el resultado de más de 15 años de trabajo del Estado Nacional, a través del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), junto con la Secretaría de Mercados Agroindustriales del Ministerio de Agroindustria (Minagro) y con gobiernos provinciales, instituciones de investigación y el sector productivo.

En julio 2016 se comenzaron los monitoreos de mosca de la fruta alrededor de 9,000 hectáreas en Tucumán y 1,300 ha en Salta y Jujuy, según informó el Senasa. El Centro Regional NOA informaba que existían más de 10,000l hectáreas de limones inscritas para exportar a Estados Unidos.

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Como sabemos, la APHIS aprobó todos los trabajos que hizo conjuntamente con el Senasa y en diciembre el organismo del USDA autorizó la importación, que luego el nuevo ministro de agricultura, suspendió por 60 días.

La exportación argentina de cítricos

Las estadísticas del sitio Federcitrus en el año 2016 indican que se exportan lo siguiente:

Fruta fresca en toneladas

Limón 185,000
Naranjas 70,247
Mandarinas 53,488

 

Los destinos principales de limón son (cifras en toneladas):

Holanda 41,278
Rusia 29,124
España 28,289
Italia 26,522

 

Jugos para industria

En el año 2015 se produjeron:

Aceite esencial 5,900 t
Pulpa congelada 800
Jugo concentrado 63,696 t
Cáscara deshidratadas Sin datos

 

El valor de la exportación en millones de USD en 2015 fue:

Jugo concentrado $195
Aceite esencial $223
Cáscara deshidratada $102
Total $749

 

La exportación de limón fresco a Estados Unidos alcanzó las 280,000 toneladas. El principal destino del limón industrializado es el mercado de los Estados Unidos y la Coca Cola. Esta firma informó a mediados del año pasado que adquiere jugos concentrados de cítricos en Argentina por $250 mdd, para el mercado interno (jugos y aguas saborizadas) y para la exportación.

“Sin dudas es una mala noticias para el sector,” dijo José Carbonell, presidente de la Federación Argentina de Citrus, desde Tucumán, ante la suspensión por 60 días.

El poderoso lobby de congresales de California que hegemoniza Sunkist y que había logrado bloquear las exportaciones argentinas desde hace décadas, logró imponer la medida por decisión del nuevo presidente y su secretario de agricultura, Sonny Perdue. Se plantean trabas fitosanitarias de parte del lobby californiano que tiene sus propios científicos que fundamentan su postura. Estados Unidos ya importa limones de Sudáfrica, Uruguay y Chile.

Al parecer se trataría de un problema circunscripto al limón en California por un monto que no alteraría el negocio de los productores estadounidenses de limón. Y lo más probable es que “a pesar de Trump” se pueda liberar dicha importación. Estados Unidos no es autosuficiente en limón como lo es en otros tipos de fruta de lo es excedentario y exporta.

La exportación de limón fresco a Estados Unicos se estimaba entre 15 y 20 mil toneladas entre abril y mayo. Todo el protocolo de exportación establecido sería controlado por la APHIS y el SENASA.

La política global del nuevo presidente (que ha ‘ajustado’ la estructura de todos los sectores menos los de las Fuerzas Armadas) puede significar, por ejemplo, que la Ford, la General Motors, la General Electric, etc., se retiren de Argentina y de otros países dejándole el mercado libre a Europa, Japon, etc. Parece improbable.

Al margen de la calificación que se haga del nuevo presidente proteccionista, cabe decir que el intercambio comercial de Argentina y Estados Unidos, fue deficitario y tuvo siempre problemas con la carne, principalmente; y el desbalance a favor de Estados Unidos se debe a la dependencia argentina en materia de insumos y bienes industriales (electrónicos, maquinarias, químicos, farmacéuticos, jaraba cola, partes de automotores, etc.) y son mas de 200 empresas norteamericanas grandes y medianas que están asentadas en Argentina produciendo o ensamblando como la maquinaria agrícola, automotor y otras. Y ahora le estamos comprando nuevamente armamentos.

La dependencia argentina ha sido histórica: financiera, industrial, y diplomática. Y no va a cambiar mientras no cambie nuestra matriz productiva y exportadora y sea más industrial que agropecuaria.

Fuente: Informe Frutihortícola, www.infofrut.com.ar, Editor: Carlos A. Ceballos Guzmán

Foto de portada cortesía de Marco Chiesa