Control de Pudrición negra en sistemas de cultivo orgánico

 

La Pudrición negra, causada por la bacteria Xanthomonas campestris pv. campestris(Xcc), es una enfermedad significativa de la col y otros cultivos de brassicáceas a nivel mundial. Esta enfermedad se describió por primera vez en nabos en Nueva York en 1893, y ha sido un problema común para los productores desde hace más de 100 años.

 

Este patógeno crece con fuerza en climas cálidos y húmedos y se propaga de planta a planta a través de la salpicadura de agua o gotas de agua transportadas por el viento y por trabajadores o animales, desplazándose de campos infectados a campos sanos. Xcc puede propagarse rápidamente durante la producción de trasplantes en invernaderos o semilleros, y puede estar en plena propagación antes de que se observe cualquier síntoma. La bacteria puede infestar las semillas e infectar los brotes mientras despuntan. El patógeno puede sobrevivir en malezas brassicáceas, como barbarea, bolsa de pastor y mostaza silvestre, así como en los residuos de cultivos en el campo. 

Cultivos susceptibles
Todos los cultivos de brassicáceas son susceptibles a la pudrición negra, incluso col, brócoli, coliflor, col de Bruselas, col china, berzas, remolacha, nabo, mostaza, colinabo, berro y rúcula.

Síntomas y biología
Generalmente, los síntomas de la pudrición negra empiezan con un amarillamiento al margen de la hoja que se expande hasta convertirse en la lesión característica en forma de “V.” La bacteria entra a la planta frecuentemente por el hidátodo, o poro de agua, en el margen de la hoja. Sin embargo, los daños a las hojas debidos a alimentación de insectos, granizo o lesión mecánica también pueden permitir la entrada del patógeno. La infección bacterial se vuelve sistémica, lo que significa que la bacteria puede entrar por las venas de la planta y propagarse a la cabeza de la col, pudiendo resultar en pérdidas graves en almacenamiento. El ennegrecimiento del tejido vascular es típico en infecciones graves.

Prevención es la mejor defensa
La prevención es crucial especialmente en la producción orgánica. Hay tres medidas preventivas que pueden reducir el riesgo de un brote de pudrición negra. 

 

Reducir el riesgo de enfermedad durante el período de crecimiento
Todo que se pueda hacer para reducir la humedad de las hojas y la salpicadura de agua, reducirá la propagación de las enfermedades. Esto incluye regar las plantas por la mañana para que las hojas se sequen antes del atardecer, mantener el sistema de irrigación en buenas condiciones para reducir la posibilidad de encharcamiento, aumentar el espaciado entre plantas y disponer las hileras según los vientos dominantes para maximizar el flujo de aire y el secado.


Estrategias de manejo

Como es el caso con la mayoría de los patógenos bacterianos, el manejo puede ser difícil cuando el tiempo sea propicio para enfermedades. Una vez que la planta esté infectada, no hay ningún tratamiento de rescate puesto que la infección es sistémica. Productos a base de cobre son eficaces para reducir la propagación de patógenos de las plantas infectadas a plantas sanas.

ATENCIÓN: Antes de aplicar cualquier producto para el control de plagas, asegúrate de leer y entender las precauciones y restricciones de su aplicación, y asegúrate de que la marca del producto esté en la lista de tu Plan de Sistema Orgánico y aprobado por tu certificador. Para más información, revisa el artículo de eOrganic Can I Use this Product for Disease Management on my Organic Farm? (¿Puedo usar este producto para el manejo de las enfermedades en mi finca orgánica?).

Aunque la pudrición negra pueda ser severa, seguir las estrategias de prevención descritas más arriba reducirá el riesgo de esta enfermedad. Aunque el patógeno pueda sobrevivir en las fincas, sabemos que ésta no es la fuente más común de inóculo en fincas que utilizan una rotación mínima de tres años; en cambio, con más frecuencia se trae el patógeno a las fincas en las semillas o las plantas. En Nueva York, nuevas cepas de este patógeno entran al estado cada año. Por lo tanto, utilizar solamente semillas limpias y trasplantes libres de enfermedades son las técnicas de manejo más importantes en regiones con inviernos fríos. En sitios con inviernos más moderados, el riesgo de mantener el patógeno en las fincas es mayor.

 

Nota: Para más información, lee la Ficha Técnica sobre el tratamiento de agua caliente para semillas (en inglés) y revisa el artículo de eOrganic Keys to Disease Management in Organic Seed Crops (Claves para el manejo de enfermedades en cultivos para producción de semillas orgánicas).


Fuente: Artículo original escrito en inglés por Christine D. Smart y Holly W. Lange, de Cornell University. Para leer el artículo original, visita http://www.extension.org/article/29925. Fotografías: Figura 1, Chris Smart; Figura 2, Holly Lange; Figura 3, Holly Lange;  Figura 4, (izquierda) Chris Smart, (derecha) Julie Kikkert; Figura 5, Holly Lange; Figura 6, Chris Smart

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