Diversificación de mercados, la mejor opción para México

Diversificación de mercados, la mejor opción para México

A últimas fechas, cada que me encuentro en un foro del sector agroalimentario en México, escucho sobre las preocupaciones que existen por las amenazas de la terminación del Tratado de Libre Comercio con América del Norte, e inevitablemente también escucho el discurso, un tanto viejo, de la necesidad que tiene el campo mexicano de diversificar sus mercados.

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Digo que el discurso de diversificar mercados es un tanto viejo, porque no surgió con la llegada del presidente Donald Trump y sus punzantes amenazas en contra de su país vecino, el discurso ha estado ahí desde hace mucho tiempo atrás.  Es más, mi primer encargo al entrar a la Secretaría de Agricultura, hace más de una década ya era claro: “poner más México en el mundo”.

¿Qué ha pasado entonces? ¿Por qué incluso cuando sabíamos de la dependencia que se creaba, no hicimos nada para disminuir el riesgo diversificando nuestros mercados?

Mi teoría es que en el sector agroalimentario mexicano existe miedo y falta de autoestima. Miedo a salir de la zona de confort y de volver a recorrer la curva de aprendizaje que nos permitió colocar más del 80% de nuestras exportaciones en Estados Unidos, y falta de autoestima porque estamos olvidando que hoy México es un país mucho más preparado, y con un nivel de competitividad muy por encima de muchos de nuestros principales competidores en el mundo. México tiene una capacidad productiva enorme y un alto nivel de calidad avalada ya por algunos de los principales países importadores de productos agroalimentarios en el mundo.

Principales destinos de las exportaciones agroalimentarias de México

Diversificación de mercados, la mejor opción para México

Lo que nos hace falta hoy es confiar en el desarrollo que detonó sí, el TLCAN, pero que con o sin tratado, se queda con nosotros. Desde hace algunos años, según cifras oficiales, el sector agroalimentario crece a un ritmo algunas veces más acelerado incluso que la propia economía nacional, y trae más divisas al país que otros sectores como el petróleo, el turismo o las remesas. Todo esto, sin que estemos siquiera cerca de alcanzar el potencial que tiene el campo en México.

Ahora, tampoco se vale pecar de egolatría y bajar la guardia, es cierto que el camino andado nos ha colocado como el 12do productor de alimentos en el mundo, y que nuestras exportaciones son de calidad internacional, pero tampoco podemos decir que todo está hecho y que la bonanza del sector en México es equitativa. No olvidemos que, al día de hoy, tan sólo 5 productos representan el 35% del valor de nuestras exportaciones. La cerveza, el aguacate, el jitomate, y el tequila han colocado a México como el 1er exportador de estos productos en el mundo, las berries nos colocan en el 4to puesto.

¿Qué pasa entonces con el resto de nuestros productos? ¿Por qué los mangos en Europa son brasileños? O peor aún, ¿por qué los aguacates que vemos en Europa y China son peruanos? Definitivamente no es que los productos sean mejores, pero al estar tan enfocados en nuestro vecino del norte, nos hemos descuidado y hemos creado oportunidades para nuestros competidores en otros mercados donde la demanda de este tipo de productos crece a tasas anuales de alrededor del 25%.

México DEBE DIVERSIFICAR MERCADOS, sí, pero antes necesita seguir integrando y fortaleciendo sus cadenas productivas, agregando valor a sus productos, mejorando sus habilidades en logística y post-cosecha, cambiando su enfoque e invirtiendo en procesos y tecnologías innovadoras, sólo así pasaremos del discurso un tanto viejo a las acciones que nos permitan seguir manteniendo posiciones interesantes en los mercados globales.

 

Artículo escrito por Mónica Cabildo Aguirre ([email protected] , [email protected]), quien es Licenciada en agro negocios por el ITESM en México. Tiene una Maestría en Economía Agrícola, Alimentaria y del Medio Ambiente en la Universidad de Ciencias Agrícolas en Suecia, además de una maestría en Análisis de Política Agrícola y Alimentaria en la Universidad Politécnica de Cataluña en España. Al día de hoy, cuenta con más de 10 años de experiencia en el sector agroalimentario internacional.