Producción sustentable de alimentos

Alimentos sustentables

La necesidad de reducir impactos ambientales derivados de actividades agrícolas para asegurar la sustentabilidad de recursos naturales, es más patente cada día. Estudios realizados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en países miembros, indican que en los últimos 15 años sus integrantes han tomado ciertas medidas para reducir los impactos de la agricultura en el ambiente.

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Sin embargo, los estudios de la OCDE enfatizan que los avances más significativos han ocurrido en zonas donde la presión ambiental ha sido mayor. En países donde hay avances, los niveles de contaminación o deterioro de recursos naturales siguen siendo elevados; las cantidades de nitrógeno y pesticidas en agua continúan siendo preocupantes en muchos países, y los riesgos de erosión de suelos y agotamiento del agua persisten en muchas regiones.

 

Impacto de la actividad agrícola

• Erosión de suelos. A pesar de que existen prácticas de conservación de suelos, la agricultura continúa contribuyendo a la erosión.

• Contaminación del agua. Este problema se ha acentuado en ciertas regiones de Europa y EUA, así como a nivel local en Australia, Canadá y Nueva Zelanda. Algunos países contribuyen significativamente a la “eutrofización,” la cual resulta en el agotamiento del oxígeno en el agua; un claro ejemplo son las aguas del Misisipí, que acarrean altas concentraciones de nitrógeno, originadas principalmente por el uso de fertilizantes y que desembocan en el Golfo de México con consecuencias devastadoras para el hábitat marino.

Desde los ‘80 hay un aumento en el establecimiento de sistemas de irrigación, propiciado en parte por apoyos gubernamentales a infraestructura de riego, lo cual no necesariamente repercute en disminuciones de consumo de agua,  sino en aumento de la superficie irrigada. Adicionalmente, este hecho se ve agravado en muchos países debido a que los precios del agua para la actividad agrícola son menores a los de industria y consumo humano.

• Agotamiento de acuíferos. Los volúmenes de agua utilizados en agricultura son preocupantes, particularmente en las zonas áridas de Australia, Sur de Europa, México y EUA, donde los niveles de extracción de agua exceden la capacidad de recarga de acuíferos, además de que la extracción de agua para uso agrícola se asocia con problemas de salinidad y con desmontes de tierras para abrir nuevas zonas agrícolas.

• Contaminación del aire. Es acentuada en las zonas de producción intensiva; existen problemas causados por el amoníaco, como es la lluvia ácida, por bromuro de metilo, con agotamiento de la capa de ozono, olores desagradables, contaminación por quema de cultivos y por efectos residuales de los pesticidas.

• Pérdida de biodiversidad. Otra preocupación, en particular por el cambio en uso de suelo causado por las prácticas de agricultura intensiva.

• Deterioro de paisajes rurales. En Australia, Nueva Zelanda y EUA, la preservación de paisajes rurales no es una prioridad para el Estado, y por tanto no cuenta con apoyos del gobierno; en contraparte, para algunos países de Europa, Japón y Corea, el paisaje rural es considerado parte de su cultura, y tema de preocupación que se refleja en políticas que preserven el paisaje.

 

Políticas y ambiente

Subsidios agrícolas u otras formas de intervención gubernamental, así como políticas de comercio internacional, influyen en la toma de decisiones — qué, cuánto y cómo producir, que incide en el ambiente.

Los subsidios ligados al producto, precio o volumen producido, repercuten en las decisiones de los productores, propiciando intensificación de producción; mayor uso de insumos, expansión de producción a zonas ambientalmente más sensibles, y reducción en flexibilidad de otras opciones de cultivos, causando distorsiones en los mercados y mayor presión a los recursos naturales.

Dado que los mercados no han logrado corresponder a las demandas ambientales de la sociedad, algunos países han realizado cambios en sus políticas, a efecto de enviar señales al sector productivo sobre su función en la conservación de recursos naturales.

Algunas medidas consisten en desvincular subsidios agrícolas de niveles de producción, precio y producto, que propicia una mejor utilización de recursos y reducción en la presión al ambiente. Otro ejemplo son las políticas que limitan la producción, que disminuyen el impacto ambiental de subsidios vinculados a la producción, pero dificultan ajustes estructurales de mayor envergadura e impacto.

 

Reflexiones

Bajo el contexto actual es evidente que las presiones internacionales a favor de la conservación de recursos naturales continuarán aumentando; los estudios de la OCDE dejan claro que conciliar metas de producción de alimentos y conservación ambiental implica contar con marcos regulatorios claros sobre derechos y responsabilidades de los productores; la definición de los casos donde debe existir una obligación de pago por el principio de que “el que contamina, paga,” o una remuneración al productor por servicios ambientales que puede ofrecer a la sociedad, como captura de carbono, conservación de recursos naturales, contribución a la belleza del paisaje, etc. — aspectos que modificarían los incentivos de la producción agrícola hacia una producción más sustentable.

 

 


Fuentes:
• OCDE. (1) Agriculture and the Environment: Lessons Learned from a Decade of OECD Work. OECD Joint Working Party on Agriculture and the Environment. June 2004. (2) Improving the environmental performance of agriculture: policy options and market approaches. 2001.

FAO. (3) The State of Food and Agriculture 2007. Paying farmers for environmental services. Agriculture Series No. 38. Rome 2008.