Patógenos en el lixiviado

Patógenos en el lixiviado

Científicos del Centro de Desarrollo e Investigaciones Agrícolas de la Universidad Estatal de Ohio, EUA, (OARDC, por sus siglas en inglés) han estudiado cómo reducir la incidencia de patógenos en el lixiviado, al productor aplicar estiércol como fertilizante a campos no labrados.

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Cientificos mostraron que una mayor cantidad del parásito Cryptosporidium se mueve más fácilmente por suelos no labrados a través del agua de exceso por las vías de drenaje, en comparación con campos labrados, especialmente durante lluvias. Al parásito se atribuye el causar la enfermedad intestinal Cryptosporidiosis, en humanos.
 
 

Fisiología del suelo

Warren Dick, microbiólogo de suelos del Centro, explica que el parásito se mueve más fácilmente debido a los macroporos creados por raíces de plantas o lombrices en la tierra.
 
 
“Encontramos que los macroporos se extienden desde la superficie del suelo hasta las vías de drenaje, proveyéndole al parásito una vía de transportación desde el estiércol hasta los recursos de agua.”  De acuerdo a estudios conducidos, la labranza del suelo reduce lixiviado del patógeno al interrumpir estas vías naturales.
 
 

 

Investigación

Los investigadores compararon seis áreas labradas con seis no labradas. Las áreas fueron tratadas con estiércol líquido que contenía el parásito a fin de probar los efectos de la labranza en el transportación del mismo.
 
 
“Antes de que cualquier lluvia artificial fuera aplicada, casi el 30 por ciento del estiércol líquido se había escurrido a través del suelo no labrado,” menciona Dick. “Durante las lluvias, un gran número de parásitos llegaron a fuentes de aguas.”
 

 

 

Beneficios a largo plazo

“Cuando el productor labra su tierra un poco sobre las vías de drenaje, éste tiene un tremendo impacto en el movimiento de nutrientes y patógenos desde la superficie del suelo hasta el drenaje, con posibilidad de disminuir el transporte de ooquistes del patógeno, hasta un 80 por ciento.”
 
 
En adición a la labranza, otros factores que influyen en el lixiviado de patógenos son el tiempo e intensidad de las lluvias. Para minimizar el impacto, los investigadores recomiendan que los productores apliquen estiércoles al menos 48 horas de lluvias esperadas.