Recubrimiento con extractos de hoja de arándano azul podría alargar la vida de anaquel de estas frutillas

Las hojas de arándano contienen sustancias fenólicas antioxidantes con propiedades antimicrobianas.

Los productores de arándano azul interesados en alargar la vida de anaquel de sus valiosas frutillas, podrían utilizar muy pronto un nuevo recubrimiento eficaz a base de hojas de arándano. Así lo asegura Yanyun Zhao una investigadora experta en productos alimentarios con valor agregado del servicio de extensión de la Universidad Estatal de Oregon (Estados Unidos).

Publicidad

El equipo de Zhao ha descubierto una sustancia presente en las hojas del arándano azul — normalmente un producto de desecho — la cual agregada a los recubrimientos de las bayas, alarga su vida poscosecha además de aportar antioxidantes.

La investigadora trabajó en colaboración con un equipo internacional de científicos en China llegando a la conclusión de que un recubrimiento comestible que contenia extractos de hoja de arándano contribuía a retrasar la descomposición de los frutos y a retener agua, lo cual ralentiza el deterioro natural de los arándanos.

Ventajas colaterales

Como beneficio agregado, el peso adicional resultado de agregar este recubrimiento podría significar un aumento en los ingresos para los productores, ya que los arándanos suelen venderse al peso.

Otra ventaja de usar estos recubrimientos naturales es la de posibilitar el lavado y la preparación de arándanos frescos como productos listos para consumir. Actualmente la mayor parte de arándanos a la venta en supermercados no están lavados, ya que el enjuague con agua elimina el recubrimiento ceroso natural que contribuye a preservar la vida de la fruta.

“Normalmente las hojas de arándano se descartan como desperdicio,” comenta Zhao, profesora de ciencias y tecnología alimentaria en la Escuela de Ciencias Agrícolas de OSU. “Pero hemos encontrado un uso que podría cambiar el modo en que se almacenan y venden los arándanos, a la vez que incrementamos su valor nutritivo.”

En resumen, además del objetivo primario de alargar la vida de anaquel del producto, este recubrimiento permitiría incrementar peso y valor nutritivo del fruto, abrir nuevos mercados y reciclar un producto de desecho.

Desarrollo de la investigación
Las hojas de arándano, usadas en ocasiones como remedio herbario, contienen altos niveles de fenólicos antioxidantes — unos compuestos químicos con propiedades antimicrobianas que protegen contra hongos y bacterias tales como E. coli y Salmonella.

Para la creación de los recubrimientos poscosecha, los investigadores mezclaron estos extractos fenólicos con chitosan, un preservante natural procedente de conchas de crustáceos. La universidad OSU probó recubrimientos hechos con hojas que habían sido cortadas en diferentes etapas de la vida del cultivo, y los extractos de estas hojas fueron formulados en cinco tratamientos de cobertura diferentes basados en distintos niveles de fenoles.

A continuación sumergieron los arándanos en el liquido de recubrimiento y posteriormente se secaron a temperatura ambiente. Zhao explica que también es posible rociar los frutos con boquillas a medida que pasan por la cinta transportadora.

Aunque no todo son ventajas, ya que el nuevo recubrimiento de los arándanos supondrá un costo adicional aún por determinar, las ventajas agregadas parecen más que suficientes para justificar el desarrollo comercial de este producto.

Fuentes: Artículo original en inglés [http://bit.ly/OSU_AgNews1432] por Daniel Robison, basado en la investigación de Yanyun Zhao [[email protected]] conducida en China en colaboracion con Yun Deng, Shanghai Jiao Tong University en Bor Luh Food Safety Center, y publicada en los diarios de Food Control and Postharvest Biology and Technology.