Mujeres en equipo de liderazgo aumentan el retorno de inversiones de su empresa

Foto cortesía de iStockphoto.

Foto cortesía de iStockphoto.

Tener la capacidad de cambiar las cosas,” fue la definición más popular de la palabra “poder” en una entrevista conducida por la revista Forbes a las 50 mujeres más poderosas de México el año pasado.

Publicidad

“Poder significa influencia y sacudir conciencias,” mencionó Denise Dresser, académica, columnista y popular analista política en México; lo cual corrobora y subraya Lydia Cacho, periodista y activista social, diciendo que “el poder es un instrumento para transformar.”

Sin embargo, un costo de abrir brechas en cualquier industria es el que conlleva ir contra estereotipos. Basta visitar cualquier evento agrícola para ver que las posiciones que conllevan la toma de decisiones están ocupadas por hombres en su gran mayoría, en contraste con el pequeño número de mujeres con el mismo propósito. Como asistente a uno de estos eventos, uno nunca se percataría que en México hay 95 hombres por cada 100 mujeres y que el “19% de empresarios del país son mujeres — eso es aproximadamente 4 millones de emprendedoras,” según datos del Instituto Nacional del Emprendedor en México.

Sin embargo, a pesar de que la industria agrícola ha sido tradicionalmente liderada por hombres, existen mujeres cuyo carisma y acciones han dejado huella en el sector.

A continuación, algunas de estas profesionales que han influenciado — y hasta transformado — la industria agrícola en Norteamérica, comparten con nosotros sus retos y perspectivas de la contribución femenina en la fuerza laboral agrícola.

 

Abriendo paso

Jackie Caplan. Foto cortesía de Frieda's Inc.

Jackie Caplan. Foto cortesía de Frieda’s Inc.

“En EUA, cuando una mujer quería trabajar para la industria de frutas y hortalizas frescas, eran referidas por otros a nuestra empresa Frieda’s, porque sabían que éramos los únicos que contratábamos mujeres para posiciones mas allá de la Contabilidad,” cuenta Karen Caplan, hija de Frieda Caplan, propietaria de Frieda’s Inc. — la primera empresa mayorista, importadora y distribuidora de productos agrícolas frescos fundada por una mujer en Estados Unidos.

Jackie Caplan, hermana de Karen, añade: “Visto desde fuera, parecía que éramos la única empresa que contrataba sólo mujeres, pero en realidad éramos una de las únicas empresas que consideraba a una mujer para posiciones que no tuvieran que ver con actividades administrativas o secretariales. Nos ganamos la reputación de dar a las mujeres oportunidades que eran mayormente reservadas para hombres en esta industria.”

“Estaba acostumbrada a ser la única mujer caminando los pasillos de la terminal de perecederos en Los Ángeles, California,” cuenta Karen Caplan. “Desde que comencé a trabajar a tiempo completo

Nancy Tucker. Foto cortesía de PMA.

Nancy Tucker. Foto cortesía de PMA.

en 1977, he visto más mujeres que se han unido a la industria, ya sean hijas de productores o profesionales educadas en agricultura.”

Nancy Tucker, Vicepresidenta de Desarrollo Comercial Internacional para Produce Marketing Association (PMA) recuerda aquellos tiempos: “Yo fui la primera mujer contratada en una posición no secretarial en la PMA; la primera mujer gerente; la primera directora, y la primera vicepresidente.

 

Ha sido bueno tener la oportunidad de traer esa perspectiva femenina a una posición gerencial,” explica Tucker, “Pero uno de los retos enfrentados es que no había muchas otras mujeres a quien tomar como ejemplo en la industria. Frieda Caplan, de Frieda’s es una de ellas, Barbara Robinson, de Sunkist es otra; pero con el pasar del tiempo, más mujeres se han ido añadiendo a la industria.”

 

 

 

 

Inés Massallach. Foto por MMW.

Inés Massallach. Foto por MMW.

Ines Massallach, fundadora de la empresa mexicana Imalinx, enfocada en la mercadotecnia de alimentos latinoamericanos, explica lo difícil que fue romper estereotipos como mujer empresaria en la industria: “Uno de los retos más importantes que enfrenté al adentrarme en la industria fue el convencer a mis compañeros de trabajo que vine para quedarme por buen tiempo. Era muy joven cuando comencé y las personas tal vez pensaban que tan pronto me casara, me retiraría de la industria.”

 

 

 

Nuevas perspectivas para el mercado
Dentro de la industria agroalimentaria, una de las organizaciones nuevas que ha visto mayor crecimiento en el último año ha sido Food Tank. La organización, fundada por dos mujeres, sirve como fuente de información y conexión entre la industria y el consumidor, a fin de traer cambios legislativos a la industria agroalimentaria.

 

Untitled3Danielle Nierenberg, cofundadora de Food Tank comenta la importancia de la mujer en la industria: “La mujer siempre ha estado envuelta en la producción de alimentos; el problema es que nunca ha sido reconocida. Reportes recientes revelan que si la sociedad invirtiera en productoras, tanto como en productores, se podría reducir la malnutrición de un 12 a un 17%. De acuerdo al Censo de Agricultura de Estados Unidos, cada vez más mujeres están envueltas en agricultura, especialmente en la agricultura sustentable; más mujeres se están convirtiendo en propietarias y gerentes de agrícolas. Está resurgiendo el reconocimiento de la mujer como parte intrínseca del sistema alimentario. Si queremos hablar de hacer la producción de alimentos mucho más sustentable y productiva, algo que estará ahí para futuras generaciones, entonces tenemos que reconocer la importante función que desempeña la mujer.”

Y es que las mujeres, realmente están cambiando la industria. Desde sus comienzos en 1962, Frieda Caplan ha sido responsable de introducir un sinnúmero de productos, considerados exóticos, en el mercado estadounidense; entre estos, jícama, kiwi, chile habanero y granada china.

“Si las personas quisieran sólo productos locales, las bananas no continuarían siendo la primera fruta en ventas en los supermercados estadounidenses, ya que estos vienen de Centroamérica. Mi mamá siempre decía que los hombres de la industria le compraban, no porque fuera mujer, sino porque vendía productos que les reportaban ganancias,” comenta Karen Caplan.

Untitled

Frieda Caplan. Foto cortesía de Frieda's Inc.

Frieda Caplan. Foto cortesía de Frieda’s Inc.

Frieda Caplan, propietaria y fundadora de Frieda’s Inc., cuenta que comenzó a trabajar en la industria como cajera para Giumarra Brothers, actualmente uno de los productores más importantes en la industria: “Cuando comencé como cajera para Giumarra, siempre estaba rodeada de compradores. Trabajé con ellos por seis años, antes de emprender mi propio negocio, el cual comencé vendiendo setas. Realmente no veía raro el hecho de ser la única mujer. Aprendí rápidamente que el motivo por el cual los hombres en la industria hacían negocios conmigo era por los productos exóticos e inusuales que yo les podía conseguir.”

Ese espíritu de emprendimiento, las ganas de aprender y de aprovechar oportunidades son características que inspiran a todo emprendedor, sin distinción de sexo.

Cuando Massallach era universitaria y trabajaba para el departamento de mercadotecnia de una cadena de comida rápida, ella vio el potencial de la mercadotecnia en la industria agroalimentaria de México. Hoy día su empresa ofrece servicios personalizados a empresarios de la industria agroalimentaria que desean promocionar su producto a través de Latinoamérica: “Nos ponemos en los zapatos de nuestros clientes y les buscamos oportunidades para brillar.”

 

Fallas en el sistema
Muchas mujeres concuerdan en que uno de los motivos por el cual no hay más mujeres presentes en la industria agroalimentaria es la falta de capacitación.

 

Margi Pruett. Foto cortesía de PMA.

Margi Pruett. Foto cortesía de PMA.

Margi Pruett, Directora Ejecutiva y Vicepresidenta de de la Fundación PMA para Talentos de la Industria comenta: “Noto que la industria está interesada, pero se ve retada en el desarrollo de talento. Hay muchas empresas con muy poca capacidad de recursos humanos, que sólo se limitan seguir la administración básica de reglas y beneficios. Las mujeres traen a la mesa una diversidad de estilos en la toma de decisiones que agrega valor a un equipo empresarial — pero la industria está bien dominada por hombres en posiciones altas — así que las empresas no se benefician de este recurso tan importante.”

Massallach recalca este punto, pero añade que en México “la mentalidad cultural es que el ‘heredero de la empresa’ sea normalmente un hombre. Pero uno puede ver que en muchas situaciones la mano derecha de la empresa es una mujer. Están ocurriendo cambios, pero aún falta mucho por crecer en esta área.”

Olivia Méndez Peña, Técnico Agropecuario y Asesora de productores de fresa, resalta la importancia de la mujer en el campo mexicano: “Existe mucha oportunidad de trabajo en el campo, pues la mujer aquí en mi región se considera en la industria de la fresa y otros cultivos, como más limpia, responsable, confiable, puntual, seria, respetuosa y honesta, entre otras cosas. Pero si no hay casi mujeres en posiciones líderes es por la falta de capacitación en las diferentes áreas que se manejan en la producción y la industria.”

Untitled4

El toque femenino
Todas las entrevistadas coinciden en que el hombre y la mujer no son iguales, sino que cada cual aporta algo diferente, y que es indispensable trabajar juntos para elevar la calidad de producción.

“La mujer trae un entendimiento integrado de la vida del hogar y del negocio,” explica Massallach. “Son los pilares de la familia, y cuando éstas adoptan esa posición en los negocios, los defienden, comparten y ayudan al crecimiento colectivo de la empresa.”

Karen Caplan recalca que “la mujer en general tiene niveles más altos de atención al detalle; estamos más orientadas a mantener relaciones duraderas y a dar seguimiento a las cosas. Esas cualidades le dan una ventaja competitiva a cualquier empresa, especialmente en el área de ventas. En la industria agroalimentaria, yo he notado que si contrata correctamente a su equipo de trabajo, este tendrá el toque de una mujer.”

Untitled2

Las investigaciones concuerdan
El caso de tener más mujeres en posiciones de liderazgo en la industria agroalimentaria se hace cada día más fuerte. Investigaciones estiman que más del 70% de los compradores finales — los que están tomando las decisiones de compras de alimentos — son mujeres. “Es lógico,” menciona Karen Caplan, “que como empresario tenga personas en posiciones de liderazgo que reflejen su consumidor final.”

Estudios sobre la mujer publicados por PMA muestran que aquellos negocios con al menos 30% de mujeres en su equipo de liderazgo tienen mejor retorno de inversión que otras empresas.

Siguiendo el dicho popular “el hombre propone y la mujer dispone,” propóngase integrar más mujeres en su equipo de liderazgo — atrévase a influenciar un cambio positivo en la industria. Recuerde que el verdadero “poder” es el tener la capacidad de transformar.

 

Fuentes: Intagri, SIAP México, Forbes Mexico, PMA.