Mitos y realidades en los proyectos de inversión

 

La creciente globalización y los ajustes financieros del mercado internacional están generando la necesidad de replantear los parámetros que determinan la rentabilidad de un proyecto, especialmente cuando se trata de grandes proyectos de inversión de agricultura intensiva.
 
 

Parámetros de inversión

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En términos generales, puede decirse que el sector de la producción de alimentos se enfrenta a grandes retos, ya que no sólo se trata de cubrir el incremento en la demanda, sino de cubrir nichos de mercado que están relacionados con productos alimentarios que ayuden a mejorar la salud del consumidor.
 
Normalmente, los parámetros más importantes al evaluar la rentabilidad de un proyecto son la inversión por unidad de superficie (hectárea o metro cuadrado), el costo de producción, y el margen de utilidad. Sin embargo, existen factores que a veces pasan desapercibidos — tasa de inflación real, costo de la curva de aprendizaje, y sobre todo, costo de mercadotecnia.
 
Controlar los costos de producción de un proyecto resulta esencial, pero hay múltiples factores a considerar, como el tipo de tecnología utilizada, el potencial productivo de la variedad y los precios de los insumos.
 
 

Cruces de información

Tomado en cuenta las experiencias de los últimos años, podemos decir que el éxito de un proyecto está relacionado estrechamente con la administración de los recursos y la estrategia utilizada para comercializar la producción.
 
Por lo tanto, la importancia de los estudios de factibilidad no es simplemente encontrar la Tasa Interna de Retorno (TIR) o el flujo de efectivo del proyecto, sino cruzar información para ayudarnos a tomar decisiones importantes al inicio del proyecto, con la alternativa de poder cambiar la estrategia en un momento determinado. La clave de un estudio de factibilidad consiste en determinar las oportunidades de negocios, y no solamente en medir parámetros que permitan asegurar el éxito de un proyecto.
 
 

Factibilidad ideal

Para darles una idea de las características ideales de un estudio de factibilidad, vamos a enumerar los siguientes puntos que integran un estudio desarrollado por el consultor Gilles Turcotte de Agrisys Consultores.
 
• Justificación del proyecto. Este punto debe tomar en cuenta las ventajas asociadas al proyecto, como pueden ser la diversificación de actividades y el enfoque en un nicho de mercado, junto con generación de fuentes de trabajo y aprovechamiento de los recursos. Para Turcotte, éste es uno de los puntos clave de un estudio de factibilidad, ya que ayuda al inversionista a describir las oportunidades de inversión.
 
• Infraestructura. En este renglón se aborda el tema de las características del terreno y la infraestructura disponible en la región. Estudios climatológicos, ambientales y del suelo son esenciales para determinar la factibilidad del proyecto; pero disponibilidad de fuentes de energía y acceso al terreno son también relevantes.
 
En este punto, es importante destacar que siempre es mejor que el terreno se ajuste a las necesidades del proyecto, y no el proyecto a las condiciones del terreno. Generalmente, el valor de la tierra representa menos de un 5% de la inversión, por lo cual es recomendable buscar el terreno más adecuado, y muchas veces estos factores están asociados a la infraestructura disponible. Sobra decir que, las fuentes de energía son por ahora uno de los factores que tienen mayor influencia en la rentabilidad de un proyecto.  
 
• Selección de equipos y tecnología. Este segmento del estudio debe ser adaptado a las necesidades de cada proyecto, y es precisamente en este punto donde se pueden obtener grandes ventajas al realizar una selección adecuada de la tecnología, o por el contrario, cometer graves errores que pondrán en riesgo la rentabilidad.
 
En pocas palabras, la selección de tecnología y equipos deberá estar en manos de expertos que puedan ofrecer una amplia referencia de sus experiencias. El costo de inversión en equipos y tecnologías debe ser razonable con los objetivos del proyecto y adaptarse a las condiciones específicas del mismo.
 
En este artículo no hay espacio suficiente para hablar de las tecnologías disponibles, pero sí podemos mencionar que la mejor tecnología no es la más económica, ni tampoco la más costosa, sino aquella que permite recuperar la inversión en el menor tiempo posible y que además proporciona los elementos para seguir invirtiendo en el corto y mediano plazo.
 
En este renglón se deberá analizar el tipo de invernadero, cubiertas, motorización, equipos de riego, calefacción y ventilación, pero sobre todo se debe analizar el diseño en su conjunto con posibilidades de crecimiento.
 
• Recursos de capital. En muchos proyectos de inversión, se considera que el capital de trabajo deberá permitir la operación de al menos los cuatro meses iniciales. Sin embargo, la experiencia de proyectos anteriores permite indicar que existen siempre imprevistos que deben ser considerados para disponer de recursos extras en caso necesario. Igualmente, en lo que respecta a la adquisición de insumos, es mejor contar con los recursos para el ciclo completo, ya que esto nos permite una mejor administración de los mismos.
 
No hay que olvidar que en este renglón es fundamental incluir el análisis del costo/beneficio de los insumos, como son semillas, sustratos, fertilizantes, control de plagas, energía y mano de obra. Igualmente, se deberán considerar los gastos anuales de licencias, certificaciones y estudios.