Melones producidos en invernadero

 

Los melones de especialidad y otras cucurbitáceas producidas en invernadero, ofrecen ventajas definitivas para los compradores y consumidores de productos agrícolas frescos. Los productores mexicanos podrían aprovecharse de esta tendencia para comercializar productos de invernadero con valor agregado y menos problemas de inocuidad.
 
 

Diferencias fundamentales

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El Dr. Dan Cantliffe, Catedrático del Departamento de Ciencias Hortícolas de la Universidad de Florida, EUA, opina que estos productos “ofrecen diferencias fundamentales, tales como calidad del producto y seguridad alimentaria.”
 
 
Cantliffe se refiere a estos melones como “melones ‘elegantes’ — cantaloupes, melones almizcleros y otros — que no deben ser cultivados a campo abierto.” Si se intenta este método de producción no protegida, “los frutos se vuelven demasiado duros. Como serían cosechados en una etapa muy temprana, nunca llegarían a madurar, por lo que nunca conseguirían un sabor pleno.
 
 
Si se dejaran más tiempo en el campo sin cosechar, permitiendo que madurasen, entonces se volverían demasiado blandos y sería imposible embarcarlos adecuadamente, además de que estarían sujetos a un mayor riesgo y número de enfermedades” por el mero hecho de permanecer durante más tiempo en el campo.
 
 

La calidad tiene un precio

“Estos melones son simplemente deliciosos, por describirlos de alguna forma, ya que son extremadamente dulces, no aguados,” apunta Belinski Santos, Catedrático de Horticultura del Centro de Investigación y Educación del Golfo de México en Balm, Florida, EUA. “Todo aquel que los cata, ya no querrá melones convencionales, porque éstos son excepcionales. Todavía es necesario estudiar la tecnología; las semillas son relativamente costosas comparadas con aquellas de otras variedades, así que debe explorarse esta alternativa desde el punto de referencia del mercado,” para mejorar su viabilidad comercial.
 
 
“Sabemos que los melones de especialidad no pueden cultivarse en campo abierto, y estos melones especiales, conllevan precios de mercado ‘especiales,’” asegura Santos. “Costco, Wal-Mart y muchas otras cadenas de supermercados, están mostrando interés en adquirir estos melones porque saben que hay mercado para ellos y que pueden conseguir un precio extra. La clave está en que hemos comprobado en pruebas anteriores que estos melones, aproximadamente del tamaño de una pelota de softball, son extremadamente dulces y conllevan una prima en precios.”
 
 

Mayor seguridad alimentaria

En lo que a seguridad alimentaria se refiere, el Dr. Cantliffe opina que la Salmonella, por ejemplo, procede del campo. De hecho, hace pocas semanas un productor de melón en Indiana, EUA — el más importante de dicho estado — se encontró con que trazas de Salmonella fueron rastreadas en una carga de frutos procedente de su operación.”
 
 
La firma, reclamó los cantaloupes que había enviado a tres estados del Oeste Medio estadounidense debido a la contaminación por este patógeno. La FDA instó al productor a reclamar sus cargas para analizarlas y desafortunadamente varios lotes de la agrícola dieron positivo en las pruebas de Salmonella.
 
 
“Con melones de invernadero,” concluye Cantliffe, “usted no va a tener este problema.”
 

Riell es un autor independiente especializado en publicaciones agroalimentarias internacionales