Impacto de insecticidas sobre crecimiento y desarrollo de la planta

Estudios conducidos en cultivos de gerberas han coincidido que la aplicación de insectidas foliares puede afectar la fotosíntesis, u obstruir parcialmente las estomas de la planta — esos poros microscópicos en las hojas por los cuales los gases (vapor de agua y CO2) son intercambiados.

Los valores fotosintéticos reducidos pueden atrasar el tiempo de producción o reducir la calidad de la planta, al igual que causar daños visibles, debido a la toxicidad química. Efectos negativos sutiles de los insecticidas en cultivos individuales, pueden acumularse y resultar en pérdidas económicas cuando son producidos múltiples cultivos.

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Examinando de cerca

Cinco insecticidas foliares fueron aplicados en cultivos de gerbera para determinar si las aplicaciones de insecticidas afectaban el crecimiento, desarrollo, fisiología y calidad de la planta. Las gerberas son ideales para el trabajo investigativo, dada su vulnerabilidad a un sinnúmero de plagas.

Las plantas fueron asperjadas semanalmente al valor recomendado (1x) o a cuatro veces el valor recomendado (4x), para determinar la probabilidad de daños a la planta en condiciones normales o de sobredosis.

Cuatro de los cinco insecticidas foliares no contribuyeron a la reducción de fotosíntesis ni a la conductancia estomatal, aun cuando se aplicó 4 veces la cantidad recomendada. Sin embargo, aplicaciones del extracto de aceite de neem hidrofóbico clarificado, redujeron la fotosíntesis, el crecimiento, el desarrollo de la planta, y la floración, con las reducciones más drásticas a valores de 4x.

Lo anterior es importante porque el productor no puede notar este cambio si no tiene plantas sin tratamiento para poder hacer la comparación. El estudio mostró además que el extracto fue inefectivo en control de trips.

El daño por trips fue notable aproximadamente en la séptima semana, cuando se hicieron presentes los brotes florales.

Es posible que pequeñas poblaciones de trips se hayan quedado en plantas tratadas con el insecticida de contacto, si éstas no tuvieron contacto directo al alimentarse dentro de los capullos las flores. Estas plantas tratadas también mostraron crecimiento atrófico y desarrollo de floración retardado en comparación con plantas con otros tratamientos.

Los efectos son atribuidos a la reducción neta de fotosíntesis y conductancia estomatal, como medida en nuestras observaciones.

Efectos no tóxicos en crecimiento y desarrollo de la planta fueron similares a los de un regulador de crecimiento. El regulador, típicamente controla los procesos de desarrollo del cultivo al influenciar el balance entre las hormonas de las plantas — usualmente al reducir la producción o grado de reacción al ácido giberélico, el cual causa la elongación de la planta.

 

Razones de peso

Dado al peso del extracto, sus aplicaciones también redujeron la condutancia estomatal de las plantas tratadas, interfiriendo con el intercambio de gas en la planta, en comparación con otras formulaciones. El aceite puede cubrir y atorar mecánicamente los estomatos de las plantas, reduciendo la fotosíntesis.

Las aplicación semanal del extracto causó la reducción del intercambio de gas en la duración del estudio; sin embargo, las plantas parecieron haber recobrado su capacidad fotosintética hacia el final del estudio.

En nuestro estudio, abamectina fue aplicada como un concentrado emulsificante, que probó ser no fitotóxico, y no afectó la fotosíntesis. Esto puede ser debido a la dosis baja permitida del producto para uso en la producción en invernaderos.

Como demostrado en este experimento, aceites asperjados tienen el potencial de interferir con el intercambio de gases, reduciendo a su vez la fotosíntesis. Cuando son utilizados de acuerdo a las recomendaciones de etiqueta, ninguno de los insecticidas probados — con excepción de las formulaciones basadas en aceite — causan efectos visibles o sutilmente negativos, por ende, son considerados seguros para la producción en invernadero.

 

 

Artículo publicado originalmente en Greenhouse Grower, febrero 2008, sobre estudio patrocinado por Floriculture & Nursery Research Initiative, EUA. Información: [email protected]