Enfermedades en macrotúnel

Enfermedades en macrotúnel

 

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Las medidas de control de enfermedades en las estructuras de macrotúneles (o túneles altos), no son muy diferentes de aquellas que se toman en invernaderos, pero existen variaciones importantes.

 
 
Las condiciones ambientales en este tipo de estructuras no son tan estables como las que se producen en los invernaderos y requieren de mayor atención diaria, así como más planificación en dichas medidas.
 
 
El control necesario de temperatura y humedad se puede lograr subiendo y bajando diariamente (por la mañana y al anochecer) las cortinas laterales de plástico. La orientación en la que se construyen los macrotúneles es crítica para asegurar el movimiento de los vientos predominantes a través de los costados del túnel.
 
 
Debido a que los macrotúneles son estructuras semipermanentes, deberían ubicarse en los mejores suelos, con muy buen drenaje y pH apropiado, así como hacer correcciones de nutrientes si fuera necesario, lo cual debería hacerse antes del establecimiento de los cultivos.
 
 
 
Las ocho prácticas de manejo sanitario sustentable descritas a continuación, permitirán lograr un control de enfermedades adecuado, siempre que sean aplicadas en combinación con una apropiada planificación.
 
 

1. Mejores prácticas de cultivo

Mantener el cultivo en su crecimiento óptimo a través de una adecuada nutrición y humedad del suelo, permitirá a las plantas crecer sin que haya periodos de interrupción del crecimiento, ya que de otra forma se podría favorecer el desarrollo de enfermedades.
 
No prepares suelos demasiado enriquecidos (por abuso de composta orgánica o fertilizantes comerciales), ya que esto promueve un excesivo crecimiento de las plantas y podría favorecer infecciones por bacterias tales como la necrosis medular en tomate causada por Pseudomonas corrugate.
 
 

2. Condiciones ambientales

La temperatura y la humedad son los dos principales factores que deben ser considerados. Los periodos con humedad relativa superior a 90% deben ser limitados, ya que la alta humedad del ambiente favorece la proliferación de numerosos patógenos.
 
El desarrollo del moho de la hoja (moho foliar, cladosporiosis, fulvia) del tomate (Fulvia fulva syn. Cladosporium fulvum), aunque no ocurre en todas las temporadas, se ve particularmente favorecido por una alta humedad relativa. Estas condiciones son también apropiadas para el desarrollo de la podredumbre gris (tizón de la flor y del tallo, botritis) producido por Botrytis cinerea. Para que ocurra la infección del oomyceto patógeno causante de el tizón tardío en las hojas y frutos del tomate (Phytophthora infestants) se requiere de alta humedad y temperaturas frescas a moderadas.
 
 
Es necesario mantener el túnel con una alta ventilación durante la mayor parte del día, lo que se logra alzando y bajando las cortinas laterales temprano en la mañana y tarde al anochecer, cuando sea posible. Es necesario además tener un adecuado drenaje alrededor de la base de las estructuras para asegurarse de que el agua no corra o entre en el túnel. Los suelos muy húmedos promueven el desarrollo de enfermedades, tanto del suelo como foliares.
 
 

3. Variedades resistentes

Siempre que sea posible, selecciona variedades resistentes a enfermedades. Si éstas no están disponibles, usa variedades tolerantes.
 
 

4. Semillas y plántulas sanas

El productor debe asegurarse de iniciar los cultivos con semillas o plántulas libres de enfermedades. Las semillas pueden portar bacterias, hongos o virus, por lo tanto éstas deben ser adquiridas a proveedores confiables, o de lo contrario deberían ser tratadas por el productor antes de la siembra.
 
Debes ser especialmente cuidadoso con las semillas de tomate y chiles, ya que éstas pueden ser portadoras de mancha bacteriana (tizón bacteriano, sarna bacteriana), peca bacteriana (mancha del halo), y cáncer bacteriano. Se debe poner también mucho cuidado en producir plántulas libres de enfermedades. Ten en cuenta que las bacterias pueden sobrevivir en el suelo, así como en las estructuras de madera que hayan sido contaminadas.
 
 

5. Rotación de cultivos

Cuando se usan unidades de varios túneles, es posible hacer rotación de cultivos entre las estructuras. En caso de que un patógeno de suelo alcance niveles inaceptables, puede ser necesario considerar la fumigación del suelo o incluso el uso de plantas injertadas sobre un portainjertos resistente.
 
 
La fusariosis (marchitez vascular, amarillamiento foliar) causada por F. oxysporum f.sp. radicis-lycopersici puede ser particularmente devastadora. En muchas regiones donde se plantan anualmente en la misma estructura cultivos susceptibles tales como solanáceas y cucurbitáceas, el injerto de plantas es una técnica muy recomendable.
 
 

6. Medidas sanitarias dentro y alrededor de la estructura

Retira y destruye cualquier tejido enfermo tan pronto como lo encuentres. No permitas que los trabajadores se muevan libremente entre los túneles y los cultivos en el campo usando ropa y calzado potencialmente contaminados. Cuando se cosecha el cultivo, extrae y destruye todo el material vegetal incluyendo raíces.
 
 
En ningún momento permitas que plantas espontáneas crezcan en el túnel. Las malezas pueden ser fuentes de áfidos y trips y éstos a su vez son vectores de enfermedades y virus. Mantén un área alrededor de las estructuras permanentes libre de cultivos y malezas con el fin de evitar el movimiento de insectos y patógenos hacia los túneles.
 
 
Algunos insectos como por ejemplo la chinche lygus (Lygus lineolaris), son atraídos hacia el tomate luego de que la alfalfa se cosecha o se cortan las malezas, y Alternaria alternata puede penetrar en los tejidos a través de las heridas producidas por estos insectos.
 
 

7. Evita mezclar en el mismo túnel, hortalizas y ornamentales

La marchitez manchada (TSWV) trasmitida por trips, es común en plantas ornamentales y trasmitida por las ninfas a cultivos como el tomate.
 
 

8. Usa fumigantes de suelo y fungicidas foliares sólo cuando sea necesario

El uso de la rotación de cultivos, medidas sanitarias y material vegetal sano, debería reducir la necesidad del empleo de fumigantes de suelo y pulverizaciones foliares. Sin embargo, a veces no es posible mantener las estructuras libres de todos los patógenos y es necesario recurrir al uso de fungicidas.      
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Recopilación del artículo “In High Tunnels, Diseases Are What You Make Them,” por Thomas A. Zitter, Catedrático del Departamento de Fitopatología de Cornell University, Ithaca, NY, EUA. http://vegetablemdonline.ppath.cornell.edu/NewsArticles/HighTunn.htm