Cuaje tardío

La rapidez de maduración y el tiempo de cosecha de sandía pueden ser aceleradas por temperaturas altas, provocando en ocasiones una escasez de sandía tardía. Al tomar esto en cuenta, hay productores de sandía que preservan cuajes más tardíos en campos de cosecha temprana para que maduren uno o dos meses después de lo normal.

La condición y salud de las guías es fundamental, ya que aportan las hojas. La planta requiere una cantidad de superficie foliar suficiente como para apoyar el desarrollo de la fruta, siendo las hojas más cercanas a la fruta en desarrollo, las más cruciales. Si estas hojas se encuentran sanas, sería prudente realizar un programa integrado con funguicidas para mantener las guías sanas, proporcionando así los fotosintatos para el cuaje tardío.

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Enfermedades ya presentes

 

Es posible que las operaciones realizadas anteriormente en la temporada puedan haber difundido enfermedades en el campo. Los daños ocasionados podrían haber contribuido más aún a la difusión de cualquier enfermedad ya presente. Así que las partes de las guías más maduras afectadas por hongos servirán como depósitos que podrían afectar a las hojas sanas, lo cual hace más difícil el proteger las hojas sanas.

Una buena cobertura con cualquier fungicida será importante, e idealmente el producto aplicado tendría aspectos sistemáticos tanto como protectantes.

Durante los meses en la última parte de la temporada, se puede observar una mezcla de enfermedades, incluyendo Alternaria, Pudrición gomosa del tallo y Antracnosis así como la posibilidad de alguna enfermedad tardía como Cenicilla polvorienta o vellosa.

El programa de control que seleccione el productor, debe enforcarse tanto en las enfermedades que están presentes en sus terrenos como en las de plantaciones cercanas. Es importante revisar bien y con frecuencia las plantas, ya que la diagnosis temprana y correcta de cualquier enfermedad existente es crucial. Además, este tipo de programa es necesario para preservar el cuaje tardío y combatir las posibles poblaciones altas de insectos que podrían haberse establecido, tales como ácaros, áfidos, y gusano de la cáscara, entre otros.

Estado de la planta

 

Es importante evaluar la condición general de las guías, las cuales son dañadas por el pisoteao durante la cosecha, reduciendo así su habilidad de llevar agua y nutrientes minerales a las hojas y frutas ubicadas hacia la parte periférica de la planta. Por eso, las áreas del campo con mucha actividad tendrán un porcentaje de frutas comercializables del cuaje tardío.

Otro factor significativo es la presencia de cualquier sandía madura todavía conectada a la planta que no haya sido cosechada por estar dañada, ser defectuosa, demasiado pequeña o simplemente por no haberse visto. Cuando una sandía se mantiene conectada a la planta, se impedirá el desarrollo de cualquier cuaje tardío, debido a las señales hormonales dentro de la planta.

Es necesario retirar estas sandías de la planta para apoyar el progreso del cuaje tardío. Una planta producirá de dos a tres frutas en un periodo normal de cosecha. Para hacer que una planta produzca más, todas las frutas maduras deben ser cosechadas.

El agua es un factor crítico

 

El agua es uno de los factores más importantes para efectuar el cuaje tardío. Con frecuencia, se presta menos atención durante y después de las operaciones de la cosecha. Las camas de cultivo se dejan secar y las plantas resultan estresadas por la escasez de agua. Esto también cambia el equilibrio de hormonas en las plantas y puede impedir el cuaje tardío o bien causar un aborto prematuro. Es vital que las plantaciones que contienen cuajes tardíos se mantengan bien irrigadas.

Finalmente, es necesario incrementar la cantidad de fertilizante para promover el cuaje tardío, mantener hojas sanas y promover el desarrollo del fruto. Nitrógeno y potasio son los nutrientes más cruciales al respecto. Unas 23-58 kg/ha adicionales de nitrógeno deben ser agregadas a través del riego. De igual manera, 23-58 kg/ha adicionales de potasio puede ser beneficioso especialmente en suelos ligeros con baja capacidad de intercambio catiónico (CIC).

 

Fuente: Gordon Johnson, Extension Vegetable & Fruit Specialist, la Universidad de Delaware, EUA. Lee el artículo original en inglés. Para más información en inglés, escribe directamente al autor: [email protected]; para más información en español, escribe a [email protected].